Tras los hechos ocurridos el 9 de septiembre del año 2001, la consideraciones mundiales en cuanto al terrorismo cambiaron para siempre.
Era un día normal y la gente llevaba a cabo su vida cotidiana cuando de un momento para el otro, toda la zona aledaña al World Trade Center, se vio sumida en una confusión total donde primó el caos, sembrando terror y paralizando los corazones estadounidenses como así también los del mundo entero, ya que la repercusión internacional fue inmediata. Las medidas de orden y seguridad llevadas a cabo en EE UU, Europa y muchos otros países del mundo en lo micro y en lo macro tuvieron que ver con el avance de la tecnología, cámaras de seguridad, reforzamiento de las fuerzas militares.
Murieron más de 3000 personas. Este hecho transformó árabe en sinónimo de terrorista, extremista, yihadista estereotipándolo negativamente. El gobierno de los Estados Unidos con George W. Bush como presidente declaró oficialmente la guerra contra el terrorismo y amparándose en dicha declaración, hizo y deshizo lo que quiso en medio oriente a través de sucesivas intervenciones militares en diferentes países.
INTERVENCIONES ESTADOUNIDENSES EN MEDIO ORIENTE DURANTE LA “GUERRA CONTRA EL TERRORISMO”
2001 – Afganistán. Se prologó hasta septiembre de 2021.
2003 – Irak. Derrocamiento de Sadam Hussein. Como no era creíble la conexión con el 11S el gobierno de EE UU acusó a Hussein de poseer “armas de destrucción masiva”. La guerra se prolongó hasta el 2013.
2007 – Somalia. Intervención en la guerra civil somalí.
2007 – Libia. Finalizó en 2011 con el derrocamiento de Muamar el Gaddafi.
2011/2012 – Yemén, Pakistán, Somalia. Ataques selectivos en la guerra contra el terrorismo.
2014 – Siria. Guerra contra el “Estado Islámico”.
La demonización del Islam:
La revista Foreign Policy asegura que el 9/11 cambió para siempre la relación del planeta con el islamismo y el mundo árabe. Desde allí, esa comunidad fue tratada con el principio de ser culpables hasta no demostrar su inocencia.
“El 9/11 visibilizó el fundamentalismo islámico, despertando prevención, desconfianza y, lastimosamente, en algunos casos, hasta desprecio por los musulmanes, quienes no tienen nada que ver con la manera retorcida como una infinita minoría ha interpretado erróneamente las nobles enseñanzas del islam”, agregó el profesor Arévalo.
¿Ataque terrorista o autoatentado?
A los eventos del 9/11 le acompañan desde entonces y hasta nuestros días, sectores que sostienen la versión oficial de los hechos y que culpan a todo el mundo árabe de todo lo sucedido con el terrorismo a nivel internacional pero por otro lado hay otros bloques que afirman mediante una serie de conjeturas y pruebas que el suceso no fue más que lo que se denomina ataque de bandera falsa perpetrado por el mismo gobierno de EE UU para darse asimismo las licencias para las futuras intervenciones llevadas a cabo.
Con nuestro deber y rol de periodistas objetivos, no afirmamos ninguna versión de los hechos ni lo ponemos a discusión, por eso lo invitamos a que si está interesado, usted mismo busque e indague sobre las distintas campanas que se manejan, sobre lo sucedido. Lo que si afirmamos es que fue un hecho tristísimo y lamentable, en la que fallecieron más de 3000 personas, inocentes, cuyo pecado únicamente fue, salir a realizar sus quehaceres de la vida cotidiana.
El Corresponsal del Sur